En la actualidad, las Naciones Unidas tiene desplegadas en el planeta Tierra 16 misiones cuyo objetivo es la pacificación de estas zonas donde la chispa de la violencia puede prender en cualquier momento. Algunas de ellas son conflictos enquistados en el tiempo que demuestran el fracaso de la comunidad internacional y otras son la historia de pequeños éxitos que han contribuido a un mundo en paz. Para ello, muchos trabajadores de la ONU han dado su vida.
Ya sabemos que hay demasiadas guerras en el mundo, hasta un 12% de los países del planeta Tierra viven un conflicto armado, a lo que hay que sumar ahora la amenaza yihadista sobre cualquier punto del globo terráqueo. Pero, se trabaja por la paz…Pues, bien, eso es lo que pretendo averiguar, cuántos y cuáles procesos de pacificación existen en estos momentos, por aquello de no perder la esperanza en el ser humano.
Para ello, acudamos a la Organización de las Naciones Unidas que dice que entre sus tareas está intentar prevenir y poner de acuerdo las partes implicadas en una contienda. Se vale de la diplomacia en una primera fase. Y si ésta no da frutos utiliza operaciones de mantenimiento de la paz, 69 misiones de este tipo se ha llevado a cabo desde su nacimiento en 1948 hasta nuestro días. A continuación, se da un paso más, y se establecen operativos de consolidación al trabajo realizado previamente, ayudando a estos países a hacer una transición que los conduzcan a una paz duradera y próspera.
Por otro lado, cada vez más estados acuden a esta organismo internacional para que se elaboren estrategias conjuntas para acabar con el terrorismo, como ya nos podemos imaginar, y también, trabajan para el desarme y no proliferación de armas químicas, biológicas y nucleares. Una vez aclarado su forma de actuar, repasamos las misiones de paz que se están llevando a cabo en estos momentos.
Europa
Misión de Administración Provisional de las Naciones Unidas en Kosovo (UNMIK)
Para empezar en el continente europeo, la Organización de Naciones Unidas desarrolla una veterana misión de paz, desde el 10 de junio de 1999, en Kosovo. Después de la intervención directa de la OTAN, con intensos bombardeos, y en respuesta a las violaciones de los derechos humanos realizadas por las autoridades serbias en Kosovo, los enfrentamientos entre el Ejército de Liberación y las fuerzas yugoslavas y las deportaciones en masa de albanokosovares efectuadas por esas fuerzas, la ONU decidió intervenir y autorizar a los Estados Miembros a que enviaran efectivos para disuadir las hostilidades, desmilitarizar al ejército y facilitar el retorno de los refugiados. De hecho, la masacre cometida se cobró la vida de unas 13.000 personas, según cálculos de la propia ONU.
Pasada esta primera etapa, se abre un nuevo período gracias a la declaración de independencia de este país, en febrero de 2008, y en ese mismo año, el 15 de junio entra en vigor una nueva Constitución, por lo que se reduce considerablemente el despliegue internacional, quedando configurado por 8 oficiales militares, 7 agentes de policía, 112 civiles extranjeros, más 215 civiles locales, y 26 voluntarios internacionales que velan porque en Kosovo se viva en paz. Su pico más alto en personal superó los 9.000 efectivos. A lo largo de estos casi 20 años, han muerto 55 personas de la ONU. Su último presupuesto anual ha rondado los 42 millones de dólares.
Fuerza de las Naciones Unidas para el Mantenimiento de la Paz en Chipre (UNFICYP)
Y la segunda de la misiones se desarrolla sobre suelo chipriota. La ONU toma cartas en el asunto en 1964, y desde entonces, está allí presente de forma activa. El problema radica en la falta de una solución política que contente a los chipriotas de origen turco y a los de origen griego.
Se podría decir que su trabajo consiste en mantener una zona de amortiguación, llevar a cabo actividades humanitarias y evitar que vuelva el conflicto armado entre las partes. Los números del operativo apabullan. Por ejemplo, las líneas de cesación del fuego se extienden aproximadamente a lo largo de unos 180 kilómetros atravesando la isla. Su ancho va desde alrededor de 20 metros hasta unos 7 kilómetros, y cubre un tres por ciento de la isla, incluyendo una parte de las tierras agrícolas más valiosas. La vigilancia se lleva a cabo mediante un sistema de puestos de observación y mediante patrullas aéreas, motorizadas y a pie. Cada año se producen cientos de incidentes como reconoce la ONU.
Pero, hay más. A fecha del 30 de noviembre de 2014 existen 926 efectivos entre militares y agentes de policía, junto a 158 cooperantes civiles entre extranjeros y locales. Las bajas que se han producido entre sus filas han sido 182. Su presupuesto anual es de casi 60 millones de dólares.
América
En el continente americano nos encontramos con el operativo de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití, (MINUSTAH). Se estableció en virtud de la resolución del 1 de junio de 2004. Ha sido una historia muy complicada no sólo por la guerra, sino, también, por las catástrofe naturales que han asolado la zona. Recordemos que el terremoto de 2010 dejó más de 220.000 muertos y país totalmente devastado, cuando aún no se ha había recuperado de un conflicto armado. A lo que había que añadir un brote de cólera, meses más tarde.
En 2011, se logró que se celebraran unas elecciones presidenciales, y desde entonces, su mandato consiste en establecer un entorno seguro y estable en el que se pueda desarrollar un proceso político, fortalecer las instituciones del Gobierno y promover y proteger los derechos humanos. Labor que se desarrolla con el trabajo de más de 8.000 efectivos entre civiles y militares. Han sido 176 las bajas producidas a lo largo de este tiempo. Y su último presupuesto anual es de 500 millones de dólares.
Asia
Y en Asia, las Naciones Unidas observa las relaciones entre las regiones de Jammu y Cachemira, en la misión denominada (UNMOGIP). En 1947, la India logra su independencia, y según el protocolo acordado, Cachemira era libre de adherirse a la India o al Pakistán. Su adhesión a la India se convirtió en fuente de controversias entre los dos países y los enfrentamientos estallaron ese mismo año. En 1949 la ONU envía un primer contingente para mediar en el conflicto.
Más tarde, a finales de 1971, las hostilidades volvieron a surgir entre la India y el Pakistán. Se iniciaron en las fronteras del Pakistán Oriental y estaban asociadas al movimiento independentista que se había desarrollado en dicha región. De hecho, este recrudecimiento dio origen a Bangladesh.
Y desde el 17 de diciembre de ese mismo año, un grupo de militares, conformado por 45 oficiales y 70 civiles, permanecen esta zona, para informar al Secretario de la ONU, y así poder actuar en caso de que se rompa el alto fuego firmado el 17 de diciembre de 1971. Las relaciones entre ambos estados siguen siendo muy complicadas. Desde sus inicios hasta ahora se han producido once bajas, y su presupuesto anual ronda los 20 millones de dólares.
Oriente Medio
Otra de las zonas más conflictivas del mundo es Oriente Medio. En esta región, la ONU está presente a través de 3 misiones internacionales. La Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en Líbano tiene su origen en la supervisión de la retirada de Israel en la zona en 1978, pero, lo cierto es que la situación ha ido empeorando cada vez más, por la llegada de nuevos actores al conflicto. Incluso, en 1982 volvió a invadirla hasta rodear Beirut.
Tras la crisis de julio y agosto de 2006, la organización tuvo que reforzar su presencia, e intentar garantizar de algún modo el acceso humanitario a los civiles y el regreso de los desplazados. En la actualidad, cuenta con 10.395 militares y 900 civiles. Más de 300 bajas se han producido entre el personal del operativo, y su presupuesto anual es uno de los más elevados, unos 509 millones de dólares.
La primera de las misiones de mantenimiento de la paz de la ONU fue la creación de un Organismo para la Vigilancia de la Tregua en Oriente Medio, su nombre es ONUVT. Y a tenor de la historia parece que no ha sido muy efectivo. Inicialmente, en 1948 se creo un grupo de observadores desarmados, pero, la guerra de Israel con Palestina en 1956 hizo que naciera la primera fuerza militar de la ONU.
Desde entonces, es evidente que los incidentes han proseguido con mayor o menor grado, y que Israel logró proclamarse como un estado de pleno derecho y Palestina aún sigue esperando. A fecha de finales de 2014 tenemos a 149 militares, junto a unos 200 civiles. Sus bajas entre sus filas han sido 5o. Su presupuesto para dos años de 74 millones de dólares. Curioso, porque tras el último recrudecimiento del conflicto, la reconstrucción de Gaza se cuantificó en 5.000 millones de dólares, así que me temo que está muy «cortito».
Y finalmente, otra de las misiones que, también, ha demostrado su fracaso es Fuerza de las Naciones Unidas de la Observación de la Separación (FNUOS), que se desarrolla en los Altos del Golán Sirio.
En 1974, la situación de las fuerzas israelíes y sirias cada vez se hizo más inestable, se intensificó el fuego cruzado entre ambas partes, y desde entonces, la ONU permanece en la región para tratar de frenar la escalada de violencia. Cuenta con 64 millones de dólares anuales, y está compuesta por 900 personas entre militares y civiles. Han sido 46 bajas las producidas.
África
Sin duda alguna el continente donde la ONU cuenta con mayor presencia es el africano. El grueso de sus misiones de paz se concentran en esta zona del mundo. De los 16 operativos que se desarrollan en la actualidad, 9 están ubicado en este punto. Nos encontramos con efectivos en el Sáhara Occidental (MINURSO) preparando un referéndum para elegir entre su independencia o su adhesión a Marruecos, llevan esperando desde 1991. Y su presupuesto anual es 55 millones de dólares. Su personal es de 250 personas, y sus bajas unas 15.
Malí (MINUSMA) ha sido uno de los últimos países en contar con control de las Naciones Unidas. Llevan así desde abril de 2013. Su objetivo es estabilizar un estado maltrecho, y por supuesto, la protección de los derechos humanos. Cuenta con más de 10.000 efectivos y casi 630 millones de dólares anuales. Han muerto unos 46 cascos azules.
Otro de los lugares calientes es Liberia. Naciones Unidas está presente desde septiembre de 2003 (UNMIL). Con una guerra civil que se cobró la vida de 150.000 víctimas y 850.000 refugiados, en definitiva, un país destrozado que aún no ha conseguido un gobierno estable. Unas 7.000 personas trabajan en su recuperación, y su presupuesto anual es de 427 millones de dólares. Comenzó en septiembre de 2003 y sus bajas entre el personal 190.
Muy cerca del anterior operativo está el despliegue de Côte d’Ivoire (ONUCI). Desde abril de 2004 actúa la ONU directamente. Primero ratificando que se cumpliera el alto el fuego entre las partes que protagonizaron una sangrienta guerra civil, y luego, desde 2010 evitando que una nueva guerra civil los asolará, tras los resultados electorales que volvió a enfrentar a la población. Finalmente, subió al poder el presidente legítimo elegido por las urnas, y ahora se trata de dar estabilidad a este nuevo gobierno. Cuenta con casi 9.000 efectivos y una dotación económica de 500 millones de dólares. Han muerto 130 personas trabajando en este misión.
Casi un año hace ya que el personal de las Naciones Unidas llegó a República Centroafricana (MINUSCA). Su objetivo fundamental es proteger a los civiles y ayudar a una transición política. Se trataba de una profunda crisis humanitaria, y que están tratando de paliar con la presencia de 10.000 efectivos, y un presupuesto inicial de 630 millones de dólares. Por fortuna, dos han sido las bajas.
Por otro lado, otras de las misiones africanas es la de la República Democrática del Congo (MONUSCO), nacida en 2010 y con los objetivos que la anterior. Aunque con una gran diferencia, sus números son muy superiores, superan los 23.000 efectivos y su dotación es la más alta de todas las misiones con más de 1.300 millones de dólares. Sus bajas son 86.
En Darfur se está desarrollando un operativo conjunto entre la ONU y la Unión Africana (UNAMID) desde 2007. Vigila la frontera entre el Chad y la República Centroafricana, Además, de proteger a la población y ayudar a los procesos democráticos con unos 20.000 efectivos y 1.150 millones de dólares. Sus bajan han rondado las 215 personas.
Y en Sudán del Sur, Naciones Unidas apoya a una de las naciones más jóvenes del mundo (UNMISS), al independizarse de Sudán. Por eso, le presta asistencia desde 2011, centrada en el respeto a los derechos humanos y en el cese de las hostilidades. Es más, en 2014 surgió una terrible hambruna que puso en peligro la supervivencia de 3,7 millones de personas. Participan unas 14000 personas, de ellas 35 han fallecido, y su presupuesto ronda los 1.000 millones de dólares.
Y por último, los cascos azules están en Sudán en una misión que trata de desmilitarizar la zona disputada de Abyei (UNISFA). Están desde 2011. Su meta es vigilar la frontera, que constituye un foco de violencia entre el norte y el sur, facilitar la entrega de ayuda humanitaria. También, está autorizada para emplear la fuerza para proteger a los civiles y los trabajadores humanitarios. Son algo más de 4.000 efectivos y su dotación es de 320 millones de dólares. Hay que sumar 17 bajas entre los trabajadores de las Naciones Unidas.
Referencias y fuentes
1. Objetivos de la ONU
2. Resolución de la misión en Kosovo (10 de junio de 1999)
3. Misión en Kosovo
4. Número de víctimas en la guerra de Kosovo
5. Misión en Chipre
7. Operaciones de Paz en el siglo XXI
8. Resolución de Haití
9. Misión de estabilización de Haití
10. Misión del Grupo de Observadores de las Naciones Unidas en la India y Pakistán.
11. Resolución sobre la India y Pakistán
12. Misión en Líbano
14. Misión de Vigilancia de la Tregua en Oriente Medio
15. Misión de Vigilancia de Separación
16. Misión en los Altos de Golán
17. Resolución de los Altos de Golán
18. Referéndum Sáhara Occidental
19. Misión en Malí
22. Misión en la República Centroafricana
24. Misión en Darfur
26. Misión en Sudán
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